Estrés familiar

La vida cotidiana y las obligaciones diarias causan estrés, no porque sean un problema sino por la ansiedad que provoca tratar de cumplir con una gran variedad de tareas. En muchas oportunidades, nuestras agendas y las de nuestra familia están demasiado completas y no hay espacio para el descanso y la relajación.

Por otro lado, algunos factores externos también producen estrés, como por ejemplo: imprevistos climáticos, la inseguridad, los vaivenes de la economía, etc. Afortunadamente, hoy en día hay muchas herramientas para manejar el estrés personal y familiar que hacen que la vida sea un poco más relajada.

En primer lugar, con relación a la inseguridad, existe una gran variedad de posibilidades para proteger a nuestra familia y no vivir estresados por el miedo a ser robados. Desde las tradicionales rejas hasta la tecnología de última generación aplicada a alarmas y dispositivos de prevención. Todo es de fácil acceso, de acuerdo con la vivienda a proteger y el presupuesto disponible.

Relaciones familiares

En algunas ocasiones las relaciones familiares se ven interferidas por las actividades de cada miembro de la familia. Quizás los chicos tienen varias actividades adicionales que realizar además de la escuela, y los padres están también muy ocupados por las tareas laborales, el estudio o el desarrollo de sus carreras.

Las familias están compuestas por diferentes individuos, con una variedad de actividades personales y grupales, por lo que los conflictos son muy frecuentes. Asimismo, cuando uno de los miembros de la familia se estresa, el equilibrio familiar se altera.

Cómo mantener el equilibrio

Aunque la idea de pasar tiempo de calidad con la familia es una idea muy repetida y hoy en día casi parece una frase hecha, es realmente importante compartir momentos especiales con la familia. Esto no significa estar todo el tiempo juntos o que a todos los miembros del grupo familiar les guste hacer las mismas cosas. Por el contrario, las charlas y los debates son muy útiles para tomar decisiones entre todos, inclusive para las actividades de ocio.

Es muy probable que una familia que logre cierta sincronización, sin dejar de lado las individualidades, funcione mucho mejor como familia y baje los niveles de estrés. El resultado de este trabajo familiar es la tranquilidad de mente y espíritu que todos ansiamos para nosotros y nuestros seres queridos.

Dentro de las actividades más simples que la familia puede realizar en conjunto, además de las salidas típicas, se encuentran remodelar o redecorar la vivienda con los mismos elementos que se encuentran allí y que dan personalidad a los espacios; el agregado de plantas a un balcón, pintar un ambiente o ir al supermercado juntos. Trabajar unidos en un proyecto en común, baja los niveles de estrés y estrecha los lazos familiares.